Baruteños le cantaron a la cruz de mayo


La Fundación del Niño Simón, la del Ateneo de Baruta, la Biblioteca Aurelio Álvarez Echezarreta y la Iglesia Nuestra Señora del Rosario, organizaron la fiesta tradicional

Foto: Un Nuevo Tiempo (página web)

            El viernes, 27 de mayo, en la Casa de la Cultura del Casco de Baruta, se llevó a cabo la tradicional fiesta de la cruz de mayo. Con ella se finalizó el ciclo de velorios que se le venían haciendo desde inicios del mes. La agrupación «Clave de Sol» se encargó de cantarle a la cruz y de crear un ambiente festivo.

            El inicio del evento estaba programado para las dos en punto de la tarde, pero éste se dio media hora después. El espacio destinado para el velorio de la cruz era reducido. El piso, blanco; y no había más decorado que el de las cinco cruces de colores muy vistosos, una mesa con pasapalos y 34 sillas blancas pegadas a las paredes. La sala estaba casi vacía.

            A las 2:30 llegó un grupo de niños de la Fundación Niño Simón. Los organizadores los hicieron sentarse en el piso, frente a las cruces.El salón se había llenado de gente. Unas sesenta personas se habían congregado para observar el festejo. En ese momento, la coordinadora de eventos, Gladys Betancourt, tomó el micrófono y comenzó a agradecer por la asistencia. Lo primero que dijo fue que, en nombre del alcalde Gerardo Blyde, de la Fundación Ateneo de Baruta, la Biblioteca Aurelio Álvarez Echezarreta, la iglesia Nuestra Señora del Rosario y la Casa de la Cultura Oswaldo Pérez Perazzo, les daban la bienvenida a los espectadores y llamó a las niñas de la Fundación Niño Simón, que estaban vestidas con unas túnicas llaneras de distintos colores y llenas de flores, a que le realizaran las ofrendas a la cruz.

            Con la entrada de las niñas al salón, inició propiamente el evento. Un grupo llevó ofrendas florales y el otro, frutales. Dos de ellas leyeron unos poemas. Cuando se terminaron de llevar los obsequios, la coordinadora llamó a la agrupación «Clave de Sol», dirigida por el maestro Lester Paredes, al centro de la reunión para iniciar con las décimas y fulías que ellos iban a a entonar.

            Armados con mandolinas, maracas, cuatros y tambores artesanales, «Clave de Sol» le rindió tributo a la cruz a través de la representación de una pieza de un estilo musical venezolano propio de las costas del país, llamado fulía cumanesca. La gente, especialmente la perteneciente a la tercera edad, estaba muy emocionada. Los aplausos corrían al ritmo de los tambores y las niñas lanzaban pétalos de rosa. El grupo estaba integrado por seis personas: dos mujeres (cantaban) y cuatro hombres(tocaban los instrumentos).

             A las 2:55 de la tarde, luego de que entonaran fulías y décimas, los músicos decidieron tocar una gaita lenta. Esto hizo que la fiesta se prendiera y la gente comenzó a bailar. Mientras tanto, los niños soltaron globos de helio. El grupo se mantuvo entreteniendo al público hasta las 3:18, cuando culminó el evento y se invitó a los participantes a tomar un refrigerio.

            Esta celebración se ha realizado por más de veinte años en el pueblo de Baruta a través del programa Rescate de las Tradiciones de la Alcaldía de Baruta y funciona a través de la Casa de la Cultura Oswaldo Pérez.La celebración de la cruz de mayo es uno de las costumbres católicas más importantes del venezolano. Con ella se busca darle la bienvenida a la estación de las lluvias.

Libia Caballero

Publicado el junio 13, 2011 en Cultural y etiquetado en , . Guarda el enlace permanente. Deja un comentario.

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